25.4.06

Recetario del convaleciente

Como dijera el primer filósofo al que le quitaron sus muelas, el Tal...es por cuales:

"LA DIETA BLANDA SON LOS RÍOS QUE VAN A DAR AL MAR QUE ES MI MUERTE."


Sopa de fideos con plátano.

Rinde un chingo. El primer día, cuando de plano no puede ni abrir la boca y los cachetes están hinchados, no aguanta uno más que un plato, así que el litro de sopa aguanta pa unos dos días. Pero sirve perfecto pa las tres comidas obligatorias.

Ingredientes:

- una bolsa de fideos de la marca que guste, pero de los que vienen listos pa comer, no de los que son solos.
- un plátano tabasco, o macho, como lo prefiera y como mejor le quepa.
- un buen puño de verduras congeladas, porque no hay tiempo de picar las frescas, y de todas formas ni saben tan mal.
- consomé de pollo d'ese comprimido, neto aguanta un montón, da un chorro de sabor. El primer día póngale medio cubito, luego el entero, que al cabo que ps qué.
- sal y pimienta con limón al gusto, dependiendo del tiempo que haya pasado desde su cirugía de muelas. De preferencia comience con dos pizcas, y aumente una por cada día que pase.

Paso uno: póngalo a hervir todo a fuego lento. ¡Ah! Excepto los plátanos.

Paso dos: sírvalo tan caliente como quiera, y póngale las rodajas de plataniux.

Acompáñelo con jugo de manzana o agua de jamaica muy bien endulzada.

Próximamente, en el recetario del estudiante, pasta con crema y atún. No es la ordinaria que cualquiera prepararía, esperen la sorpresa.

Aprovecho para promocionar los productos Chepina, en especial el pollo en salsa de pasilla, no apta para recién operados de las muelas, sino para cuando la convalecencia ha pasado y sea tiempo de tomar venganza gastronómica.

21.4.06

No cambia nada en los amigos

El sujeto "X" (porque si no luego mi amigo Alejandro se enoja), se aquietó, levantó la cabeza, fijó la mirada y encendió las pobladas cejas hasta lo más alto. "A" ya sabía, y pensaba que "X" también. "X" vivió con "e" hasta que éste emprendió el vuelo a las bajas tierras de periférico sur, pero siguen siendo muy amigos, desde la primaria. El día del asado en casa de "A", "X" no tenía nada mejor qué hacer, estaba en su casa picándose los ojos frente a la computadora y revisando en su celular si había mensajes o llamadas perdidas, pues iba muy seguido al baño. Ver a su rubio amigo besar y abrazar a otro hombre le puso inmóvil, sin oler más el plato recién servido. Yo tampoco lo hubiera imaginado jamás. "X" pensó entonces que era posible estar ahí no por casualidad, y en invitar a "E" un café al día siguiente, nomás pa celebrar.
Lo que importa es que son amigos, lo demás no cambia nada.

12.4.06

La pregunta que estableció las reglas.

Los alumnos que integramos Espacio Vanguardia estamos obligados a varias cosas, entre ellas a asistir diario a la inauguración previa a la conferencia plenaria, en la cual pasan un video collage de uy qué propositivos y contraculturales somos los jóvenes, un performance rarísimo sobre política, con todo y palabrotas en los diálogos, ya sabes ouee, locochón pa los chavos, y una presentación de los 10 años de Espacio, en la cual los vanguardia tenemos que aplaudir cuando sale la parte que nos corresponde.
Total que no van quince minutos de evento y uno ya se quiere salir de ahí. Varios -muchos- así lo hicimos: que a dar el rol por el área de comida, que a pasiar a ver qué veíamos, que por agua o cualquier cosa. Unos regresábamos si la conferencia prometía, otros se quedaban dormidos en el hombro del de enseguida, unos menos se quedaban a dormir en el hotel pa llegar nomás a las sesiones de trabajo o a los talleres. La gente que no es de vanguardia nomás se sacaba de onda y armaba un escandalote pa salir del polideportivo donde nos recluían.
Un día, mi nueva amiga Liz, lingüista de la Autónoma de Sonora, me pregunta: ¿traes un chicle? No. Entonces creo que así me voy a parar a hacer mi pregunta:
"Buenos días, mi nombre es Lizeth, vengo de la Universidad Autónoma de Sonora y pertenezco a la comisión de Educación y Cultura de Espacio Vanguardia. Mi pregunta es tanto para los ponentes como para la moderadora y el público en general:
¿alguien tiene un chicle? Si son dos, mejor."

11.4.06

Comentario que puse en el blog de Sal

Mi comisión de Espacio Vanguardia, Educación y Cultura, fue muy clara en sus cuestionamientos durante el encuentro que tuvimos con Calderón. Mi compañero Gezén fue muy claro cuando terminó de leer la última línea de nuestra declaración: ¿No cree que es más importante la educación que lanzar una nueva línea de ropa?
Yo me ocupé de formular una pregunta que me interesaba. Mantuve mi mente trabajando tanto en poner atenchon al candidato como en hacer que mi pregunta fuera contundente. Claudio González, presidente de Fundación Televisa y moderador del encuentro, comenzó a dar la palabra. Desde antes yo había hecho trato con la chica del micro a través de sexys guiños de ojo, pero el guapísimo señor filántropo y moderador se encargó de omitir este silencioso convenio.
Levantaba la mano con sumo entusiasmo, bien alta, altísima. Pero no, no me daban la palabra. Al final, Claudio apuntó a otro par de personas como las últimas. Me frustré tanto, que me enojé, me iba a salir.
De repente, el nuevo amor de mi vida, filántropo empresarial que compensa su sello Televisa con su galanura y encanto, dijo: Felipe, creo que tenemos tiempo todavía para una última pregunta. Sí, ese guapo hombre decidió darme una oportunidad. Lo amo.
A pesar de que, al igual que todos los ponentes del congreso, Felipe Calderón no se molestó en ser claro con ninguna de sus respuestas, la verdad es que mi pregunta me quedó bien bonita:
“Mi nombre es Alejandro Murillo, pertenezco a Espacio Vanguardia. Comparto el mismo sentimiento que mis compañeros en cuanto a las reformas a la ley de radio y televisión, por lo cual quisiera exhortarlo a que de verdad promueva la discusión amplia sobre el tema. Mi pregunta es: ¿de qué manera piensa satisfacer las demandas de la comunidad homosexual mexicana, una cuestión que creo debe preocuparle contando en el partido y su campaña con personas de esta preferencia? Si bien es cierto que en México es todavía impensable el concepto de familia con padres del mismo sexo, ¿por qué no aceptar la legislación de otros, como las sociedades de convivencia?”
¿Qué taaaal, ehhhh?

7.4.06

¡Mamá, prende la video!

Ayer salí en la tele, tres veces. No me incomoda, actué.

Esto de los Congresos es una farsa, un escaparate para los empresarios. He aprendido muchas cosas, como que realmente la juventud de este país está conformada por gente pensante, proveniente en su mayoría de las universidades públicas, capaces de proponer iniciativas para mejorar nuestras múltiples problemáticas como nación y sociedad, de trabajar en equipo con tolerancia y madurez, de desvelarse hasta considerar que sus líneas de acción se encuentran legal y moralmente fundamentadas, comprometidos con ellos mismos y la sociedad...pero también con la idea de mercado laboral.


No tengo problemas con que se le llame mercado y se le apellide laboral. Es un imaginario, una forma de llamarlo y hacer que algo tenga sentido. Pero hay quienes lo ponen por encima de sus capacidades para proponere cuestionar. Encima del trabajo conjunto entre equipos porque creen que es indigno aceptar sugerencias ajenas al trabajo de uno, como si éste fuera universal. Arriba de resolver problemas sociales porque mejor me preocupo por hacerme notar para que no quede duda de quién va a obtener las becas para estudiar inglés gracias al verborreo y la "facilidad de palabra".

Me ha quedado claro que hay que tener un plan de vida, así como me ha quedado claro que no quiero ser un joven comprometido para convertirme en cualquier diputado común y corriente.

5.4.06

DESDE CULIACAN, EN UNA COMPUTADORA SIN ACENTOS, REQUIERO DE UN DESCANSO. AGUANTEN.

1.4.06

La dieta blanda y la dieta dura (último post sobre muelas, hasta que me las saquen el 21 de abril)

La cirugía esa una tortura anticipada. Las muelas extraídas ya no dolían, pero había que seguir con las pastas y el yogurth. Era necesaria la dieta blanda o la herida no sanaría. Afortunadamente, a los dos días la doctora dió de alta las comidas sin grasa ni irritantes. Para entonces, la dieta blanda había molido el estómago y los antojos eran muchos.
Pero ya no imortaba, porque de pronto, como un manjar, aparecieron frente a mí los milagros: un cigarro, un chocolate y una empanada de mole rojo.
Fumé al aire libfe, afuera del edificio, para olvidarme del solitario cineclub de los corazones rotos. Calibré cada inhalación para que rindiera el efecto. Di cada mordida para sentir la reacción del picante en la sangre. Los saboreé y disfruté como si no los hubiera probado en meses, aún cuando realmente no lo había hecho por semanas.
Todavía me espera el chocolate. Me contengo porque luego la memoria falla y con la mezcla de sabores entraré intolerante en una crisis de más antojos. ¡Suficiente! Daré la priemra mordida.

Tengo alma, pero no soy un soldado.

La belleza está donde uno la encuentra.