10.11.05

Palabras al viento

No a todas las palabras se las lleva el viento. Creo que respiramos palabras que otros dijeron, que el aire las llevó, pero para dejarlas flotando hasta caer en nosotros.
Contra la palabra hablada, la escrita tiene la ventaja de permanecer en el tiempo. Cuando hablamos, las razones se nos escapan, ocasionando involuntarias confesiones. Cuando escribimos, el control radica en poder borrar, aunque sea a tachones, cualquier pensamiento si se quiere o se prefiere.
Pero, de cualquier forma, escribitas o habladas, sucede que las palabras no siempre van a expresar exactamente lo que se quiere decir. Acaso faltará al menos una que complete nuestras frases y explicaciones, y entonces haya que intentar una nueva manera de decir o escribir las cosas.
Es por ello que no se tiene forma de dejar en claro que ya no te amo porque encontré a alguien más; que no me gustó porque no me gustó; que sabe raro porque no sabe a eso otro que sabe como sabe; que no encuentro qué escribir porque podría escribir de todo y de nada. Que hay mil pretextos, todos muy elementales.

2 comentarios:

Livi Jazmín dijo...

Qué post más bello. Polisemia. Interpretación. Contexto.
P.D: Me debes dos cosas: la primera es el períódico donde sale "ejejé" y la segunda es ir al empleo aquel, donde probarían medicamento en nuestros esculturales cuerpos.

Cory dijo...

Propongo la comunicación telepática (si se pudiera...oh, if only...)

Tengo alma, pero no soy un soldado.

La belleza está donde uno la encuentra.