Malditas cineastas sudacas, entre la directora de esta maravilla y Lucrecia Martell, me van a volver loco, lleno de paradójicos corajes que me hacen feliz porque todavía hay quienes descubren maromas expresivas en el cine no subtiulado.
El conflicto implícito y desvelado en dosis de corticoide, para que primero parezca una cosa y luego otra y al final una completamente nueva.
UFF...
4 comentarios:
Con lo perturbador de las historias de las últimas películas que me han gustado mucho, creo que un día de estos me haré un ciclo de cine más o menos así: Malos hábitos, Inland Empire, La niña santa, Vírgenes suicidas, XXY...complete usted la lista
Hairspray, Bailando en la Oscuridad y Chicago.
= )
A Ayala Blanco le dio mucha hueva esta de la hermafrodita.
"La niña santa" y "La ciénaga" son películas muy inquietantes. Lo dices muy bien: una maroma, un triple salto mortal que, sin embargo, parece tan reposado, tan natural, que casi ni se siente el inmenso esfuerzo hecho... Saludos, LoveDoctor!
esta me encanto!
Ines Efron, IMPECABLE
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