La vida con música

"Está bien padre", fue la opinión unánime. "Yo estaba ocupada encontrando respuestas mientras tú simplemente seguías con la vida real" es una película llena de música, riesgosa obra que peligra hasta un enfrentamiento con Michael Jackson, si es que el rey del pop (así, con minúsculas), alcanza a reconocer las melodías que entonan las protagonistas de la misma.

"Además, a esa edad todo es música", dijo Luis con suma nostalgia cuando Raúl pidió opiniones a cerca de su tesis aquella noche en que hicimos el gran estreno en casa de Vincent, a quien recientemente vi un poco más aseñorado pero igual de bonito afrancesado.

El punto es que, a mis veintiún recién cumplidos, prefiero no rendirle cuentas a nadie sino a mi mismo, mientras meneo la cabeza en el metro o en el pesero, al mismo tiempo que leo mi libro de Mendicutti y me quito de preocupaciones. Porque no importa cuánto smog escupa esta ciudad, las nubes nunca dejarán de ser blancas si en el mini disc suenan madonna, pulp, rem, pj harvey, miranda, interpol, fiona apple, muse, berenice, air, billy idol, george michael, pet shop boys, boy george, morrissey, david bowie, artic monkeys, the walkmen, texas, dido, postal service, kula shaker, the beatles, madonna otra vez y los que me faltan...